Con la presencia de colegas, alumnos y amigos, Noé Jitrik (Rivera, Provincia de Buenos Aires, 23 de enero de 1928) recibió la noche del 14 de noviembre el Premio Internacional de Ensayo Pedro Henríquez Ureña, distinción con la que anualmente la Academia Mexicana de la Lengua reconoce la trayectoria de un ensayista destacado de lengua española.
En el presídium de la ceremonia acompañaron a Noé Jitrik, Jaime Labastida, director de la Academia, Felipe Garrido, director adjunto, Adolfo Castañón, bibliotecario y miembro del jurado, y Alejandro Higashi, miembro de número.
Antes de dar inicio a la sesión, Jaime Labastida pidió un minuto de silencio por Fernando del Paso (1935-2018), fallecido ese mismo día.
En la lectura del dictamen del jurado, efectuada por Adolfo Castañón, se reconoció “una trayectoria de vida dedicada a la escritura, a la crítica y a la cultura hispanomericana que se expresa a lo largo de una obra tan diversa como comprometida con el conocimiento de la escritura y la lectura en Hispanoamérica. Sus ensayos y trabajos sobre Sarmiento, Echeverría, Martí, Darío, Lugones, Quiroga, Arlt, Borges, y Rulfo, entre muchos otros, se complementan con una búsqueda y definición de los mecanismos de la escritura y de la lectura en y desde Hispanoamérica".
Por su parte, Jaime Labastida reconoció en su laudatio la importancia que los trabajos de Noé Jitrik han dado a las categorías de la visión y de la escritura como acciones fundadoras de la compleja identidad latinoamericana desde los tiempos de Cristobal Colón, en cuyas cartas -según el premiado- la visión del almirante descubre una especie de paraíso, que como un Adán nombra por primera vez en sus cartas a los reyes católicos, fundando así el ensayo latinoamericano. Destacó además Jaime Labastida la larga relación de Jitrik con México, país donde dictó numerosas cátedras entre otras instituciones, en El Colegio de México y en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Finalmente, declaró que la entrega de este premio es un saldo de justicia con el ensayista argentino que tanto ha aportado a la cultura letrada mexicana.
A su turno y después de los agradecimientos, Noé Jitrik lamentó a su vez el fallecimiento de Fernando del Paso, escritor, dijo, de la más alta lucidez y concentración poética y prosódica de nuestra lengua. En seguida dio lectura a su discurso donde rememoró su trayectoria y su relación con México, país que lo acogió durante el periodo de la dictadura argentina y donde pudo relacionarse con los grandes escritores locales. También reflexionó sobre la figura del dominicano Pedro Henríquez Ureña, a quien relacionó con la condición del exilio y de la búsqueda de la identidad latinoamericana con libros como Cuatro ensayos en busca de nuestra expresión y su labor en la Facultad de Filología de Buenos Aires. "Me pregunto qué pensarían los grandes latinoamericanistas, Pedro Henríquez Ureña, José Vasconcelos o Alfonso Reyes de la situación actual de nuestro continente. Ellos no buscaban una utopía, sino tan sólo una realidad digna de ser vivida. Hoy en cambio el dinero de unos pocos es la medida de todas cosas, y la literatura ha sido privatizada por los grandes intereses comerciales. No investigamos el pasado y sus grandes autores sino porque en ellos está la posibilidad de una vida más digna. Hoy la situación de América Latina es muy precaria. Pero México está volviendo a ser una esperanza", concluyó.
Algunos de los premios y reconocimientos con los que ha sido distinguido Noé Jitrik son el Premio Xavier Villaurrutia 1981; Chevalier des Arts et des Lettres, 1993; Honorary Membership de la Modern Language Association of America, 1999; Premio de Ensayo Esteban Echeverría, 2002; Doctorado Honoris Causa, otorgado por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, 2000, por la Universidad Nacional de Cuyo, 2009, por la Universidad de la República, Montevideo, 2009, y por la Universidad Nacional de Tucumán, 2017. Ha sido designado profesor honorario por diversas instituciones universitarias, como la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, 1995; la Universidad de los Andes, Mérida (Venezuela), 2005; la Universidad Nacional del Nordeste, en 2001; la Universidad Nacional de Mar del Plata, 2014, y la Universidad Nacional de Formosa, agosto de 2017.
El acto concluyó con la interpretación a cargo del pianista Fernando García Torres, de los Dos estudios, Op. 10, No. 3 en Mi Mayor de Fédéric Chopin.
